Dice Matthew Perry, quien tenía el rol de Chandler Bing. Mientras hacia reír a 30 millones de espectadores, él pasaba por años oscuros de adicción.

En Friends, Lovers and the Big Terrible Thing confiesa que con el pasar de las temporadas él puede reconocer perfectamente cómo su deterioro se hacia evidente… y es un proceso que le es muy doloroso revivir.

Si bien no se trata de una historia feliz, sí cuenta con esperanza y persistencia: en esta auto-biografía el actor comparte cómo superó este tipo de sustancias, qué lo llevó a reponerse y salir adelante.

Con su testimonio íntimo, honesto, a veces desde el humor y muchas otras desgarrador… espera que esto pueda ser de utilidad a quienes estén en un rumbo similar, o para las familias que deben acompañar a alguno de los suyos, que padezca esta tendencia.

Nada parece fácil, pero él consideró que valía la pena contar qué pasaba en el detrás de escena. «I am enough, I am more than enough, and I don’t need to put on a show anymore… I am me and that should be enough, and it always has been enough. I was the one who didn’t get that, and now I do», reconoce.

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